Bullrich se abrazó con Milei y la UCR, la coalición cívica y parte del PRO rechazaron con duros términos el acuerdo
El naufragio parecía inevitable tras la estruendosa derrota del domingo pasado. Pero nadie esperaba que fuera tan rápido. Apenas 72 horas después de quedar afuera del balotaje, Maruricio Macri apuró la decisión de jugar para Javier Milei y arrastró a Patricia Bullrich, la cara visible de Juntos por el Cambio, a darle públicamente el apoyo al libertario, sin importarle el terremoto que eso podía generar en la coalición opositora.
Los primeros en salir a sentar posición tras el anuncio fueron los radicales. Tras una reunión del Comité Nacional, la UCR comunicó que no acompañará a ninguno de los candidatos, ni a Milei ni a Massa, “porque ninguno de los dos garantiza un futuro de progreso para la Argentina”.
“Sergio Massa es tan responsable como Alberto Fernández y Cristina Kirchner del estado del país, de su empobrecimiento, del proceso inflacionario, la corrupción y del deterioro social y económico de la Argentina”, dice el texto del comunicado que emitió el radicalismo. Y agrega: “El extremismo demagógico de Javier Milei se encuentra en las antípodas de nuestro pensamiento. Jamás podríamos tener nada que ver con su espacio”.
Pero los blancos de las críticas fueron principalmente Bullrich y Macri. Gerardo Morales, titular del partido, apuntó directamente a la ex candidata por el acuerdo. “Es una falta de respeto hacia nosotros que no perdonamos y pone en riesgo la continuidad de Juntos por el Cambio”, advirtió.
El anuncio también llevó a una evidente fractura del PRO. Horacio Rodríguez Larreta sostuvo que “las dos opciones para el balotaje son muy malas para los argentinos”, resaltó que La Libertad Avanza tiene una postura “al borde de la democracia” y recordó que Milei lo trató de “rata” y que dijo que lo iba “a matar”.
El Jefe de Gobierno porteño fue más allá y buscó mostrarse como una alternativa para liderar a la oposición, sea cual sea el futuro gobierno, lejos ya de Macri y de Bullrich. “Voy a trabajar para que estemos juntos. Cuanta más fortaleza, más diputados y más senadores tengamos, más fuerte va a ser nuestra capacidad de cuidar a los argentinos como oposición ante el gobierno que viene”.
Mientras tanto, Milei siguió con el tono confrontativo. En lugar de buscar calmar las aguas para sumar votos, lo que se supone que es su misión de acá al 19 de noviembre, criticó duramente a quienes rechazaron el acuerdo con Bullrich y pidió “que se hagan cargo de las consecuencias” si Massa es presidente. El candidato dijo que él “habría hecho exactamente lo mismo” de haber quedado tercero y sostuvo, en sintonía con Bullrich, que “enfrente está el populismo, la decadencia, la inflación y la corrupción”.
La ahora ex candidata también se refirió al rechazo que generó su adhesión dentro de las filas de Juntos por el Cambio y al pedido de neutralidad de los distintos gobernadores electos del espacio. “Se sumen o no se sumen, nuestro proyecto es de cambio. El que quiera la continuidad, allá ellos. Nosotros, al 24% de gente que nos votó, le dijimos ‘queremos un cambio’. Hoy quien ganó la bandera de ese cambio está arriba nuestro y lo tenemos que reconocer”, cerró para luego darle un abrazo a Milei.
