Secundaria Bonaerense, una reforma incoherente y arbitraria

Secundaria Bonaerense, una reforma incoherente y arbitraria

El gobierno está a punto de concretar cuatro años de vida institucional del Nivel Secundario sin plena vigencia del régimen académico. El RA académico ordena la vida institucional de cualquier espacio educativo, en este caso tiene impacto en 1.711.219 alumnos y 4682 escuelas.

1. El texto propuesto es confuso, ambiguo y arbitrario. El RA debe ser uno solo, y no un compendio de resoluciones y disposiciones contradictorias y confusas que promueven la incertidumbre en el funcionamiento de las instituciones educativas con las consecuencias que esto genera para la toma de decisiones de los equipos directivos.

Es oportuno señalar que esta modificación es un cambio de reglas con el ciclo lectivo iniciado hace siete semanas.

Su principal incoherencia es mantener el Régimen vigente de la Resolución 587/11 y, al mismo tiempo, poner en vigencia nuevas consideraciones que se contraponen con el anterior.

2. Nos oponemos al sistema híbrido de calificación con la combinación de la calificación cualitativa – Trayectoria Educativa Avanzada (TEA), Trayectoria Educativa en Proceso (TEP) y Trayectoria Educativa Discontinua (TED) – con calificación numérica anual.

El régimen académico vigente establece calificación numérica para cada trimestre. La calificación de las materias con dos modalidades, numérica y no numérica, conforma un sistema híbrido de calificación. A los efectos de simplificar este punto consideramos pertinente optar por la calificación numérica, siendo esta más sencilla y arraigada como práctica en la comunidad educativa, situación que no impide las rúbricas y notas conceptuales que la profesionalidad docente emplea a lo largo de las cursadas regulares como instancias previas a la calificación final de los trimestres. Es importante destacar que la calificación numérica es normativa para los niveles primario y superior.

Al mismo tiempo y entendiendo como positiva la cuatrimestralización de la cursada, debería considerarse la necesidad de calificar de manera numérica para el cierre de dicha instancia, promediando las notas cuatrimestrales para la calificación anual.

3. Con respecto a las instancias de intensificación, resulta contradictorio con mantener vigentes los períodos de orientación y con ello las comisiones evaluadoras que permiten evaluar las trayectorias de los alumnos. Esta ambigüedad es contraproducente.

La mejora de los procesos de intensificación deben ser funcionales a la participación y rendimiento de los alumnos en las comisiones evaluadoras.

Las mesas evaluadoras tienen una doble función y garantía para el alumno y el docente. Al momento de evaluar y calificar el docente cuenta con la presencia de dos colegas que  participan del desarrollo de la mesa y dan fe de la tarea allí realizada. Al mismo tiempo, es una garantía para el alumno, frente a cualquier arbitrariedad o situación irregular en la tarea de quien preside la mesa.

Los docentes han estado realizando de manera simultánea tareas de intensificación y evaluación mientras daban clases a sus alumnos regulares, a lo largo del mes de marzo, con las consiguientes dificultades y obstáculos que esto significa para su tarea y para la correcta evaluación y calificación del alumno que está intensificando, tal como sucedió durante el mes de marzo por la injustificada y arbitraria postergación de la carga de calificaciones hasta el 31 de marzo para los alumnos de 1° a 5° en la plataforma Mis Estudiantes del portal www.abc.gob.ar .

Esta constante e interminable continuidad del proceso de intensificación ha profundizado la incertidumbre en referencia a la situación académica de los alumnos, con innumerables conflictos y cuestionamientos a la tarea docente.

Hay coincidencias en el mundo académico y profesional docente de que las mayores dificultades sobre las trayectorias educativas están en este nivel.

En las pruebas aprender 2019 para alumnos de 5°año se observó que el 38% de los alumnos tiene un nivel básico o por debajo del básico en prácticas del Lenguaje, con peor desarrollo en matemáticas donde el 71% de los evaluados quedo en esa condición.

Datos demasiados contundentes para propuestas tan parciales e insuficientes que solo aspiran a ocultar los datos sobre abandono escolar y repitencia tal como se viene realizando en los últimos tres años con la sistemática vulneración del régimen académico. 

Estamos dispuestos a discutir con seriedad los desafíos del sistema educativo en la provincia de Buenos Aires, con propuestas integrales, razonables y de largo plazo.

Diego Julio Martínez

Consejero General de Cultura y Educación

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Open chat
1
Contanos qué pasa en tu barrio...
¿Cómo podemos acompañarte?