Los intendentes peronistas se reunieron con Kicillof y le pidieron que encabece la oposición
Preocupación e incertidumbre. Esas dos palabras definen las sensaciones que sobrevolaron la reunión entre el gobernador bonaerense Axel Kicillof y los intendentes peronistas para analizar el nuevo escenario que arrancará el 10 de diciembre con Javier Milei como presidente.
Las principales inquietudes pasan por la disponibilidad de recursos para el pago del medio aguinaldo y por el anunciado freno a la obra pública. El 50% del dinero que usa la provincia para sostener la estructura estatal y pagar salarios viene de la Nación pero desde el espacio libertario se aferran al mantra de “No hay plata” y las negociaciones se anticipan muy duras. Lo que antes fluía con Alberto Fernández y Massa en el Gobierno ahora amenaza con ser apenas un goteo.
Es por eso que los intendentes le pidieron al gobernador que sea el conductor de la oposición ante el ajuste y pelee por los fondos necesarios para continuar con sus administraciones. Es que en muchos municipios la obra pública además implica fuentes de trabajo y ningún jefe comunal quiere recortar en su territorio.
El viernes Kicillof se reunió con Guillermo Francos, futuro ministro del interior y con quién tendrá que negociar durante los próximos años. Y pese a que le expuso las necesidades de la provincia, no obtuvo ninguna respuesta concreta o tranquilizadora.
Una opción que baraja el gobernador y que transmitió a los intendentes es la de obtener financiamiento externo para poder afrontar tanto las obligaciones provinciales como municipales. Pero para eso debe volver a pedir autorización a la Legislatura, que ya le dio luz verde a la toma de deuda de unos 150 millones de dólares para la última etapa de su primer mandato.
El panorama cambió. Kicillof se prepara para ser oposición y dejar de tener los abundantes recursos de los que siempre gozó. La premisa es no resignar los programas sociales ni la ejecución de obras. Tampoco capital político. Habrá que ver cómo asume su nuevo rol. Se avecinan 4 años duros para la provincia.
