Merlo: Matan a un empresario en su propia casa para robarle
La inseguridad feroz no solo ataca en las calles sino también en la casas. En el conurbano parece que uno ya no está seguro ni siquiera mientras duerme. Una violenta entradera en San Antonio de Padua terminó con un hombre asesinado y su esposa gravemente herida y con peligro de muerte. El caso despierta otra vez el debate sobre si las víctimas deben defenderse o no, aún cuando se vulnera lo más íntimo que tienen, que es el lugar en donde viven.
Dos delincuentes entraron de madrugada por una ventana sin rejas de la casa ubicada en Italia al 1000 mientras otros dos esperaban en un auto color gris listos para escapar y uno hacía de campana.
Los ladrones, que habían elegido el chalet por lo suntuoso que parece desde afuera, estaban armados, sorprendieron a la pareja mientras dormía e intentaron reducirla. Pero Gabriel Izzo, el dueño de casa y un conocido empresario de la zona, quiso defenderse con una pistola 9 mm, que se habría trabado. Al ver el arma, los delincuentes no dudaron y respondieron a los tiros. El hombre recibió un balazo en la cabeza y murió en el acto mientras que su mujer fue herida con un tiro en el abdomen y otro en el ojo. En la vivienda también estaba la suegra del hombre asesinado, una mujer de 83 años que estaba dentro de su habitación y al parecer no salió en ningún momento.
Los asesinos pudieron robar algunas cosas y escaparon en el auto en el que habían llegado dejando un tendal de sangre y muerte en la casa y siguen prófugos. Los investigadores encontraron precintos plásticos y una gorra que sería de uno de los ladrones. La fiscal María Teresa Monti caratuló el caso como homicidio en ocasión de robo. La mujer del hombre asesinado fue derivada al Hospital Eva Perón en muy grave estado.