Intendentes contra Kicillof: “está desfinanciando municipios opositores”

Los intendentes de Juntos por el Cambio se reunieron este martes en La Plata para poner sobre la mesa sus distintas urgencias y consensuar un reclamo conjunto al gobernador Axel Kicillof, con quien la relación es cada vez más tensa al calor de la campaña.

Participaron la mayoría de los 58 jefes comunales de la oposición y reclamaron ser recibidos en la gobernación para buscarle solución a distintas problemáticas que, en medio de la aceleración de la crisis, son cada vez más agudas. “Asfixian a las economías municipales, afectando la calidad de vida de 6 millones de bonaerenses”, denunciaron.

El principal reclamo es por el desfinanciamiento que sufren los municipios, a raíz de la demora del pago por parte de la Provincia de distintos fondos para seguridad y obras públicas. En el comunicado que firmaron advierten que el ejecutivo provincial adeuda sumas desde marzo y que, en muchos casos, la inflación hace que, por ejemplo, el dinero destinado a obras no alcance cuando se acredita. “Esto obliga a la paralización de obras comprometidas con la consecuente falta de respuestas a nuestros vecinos que esperan la ejecución y el cumplimiento de las mismas, a su vez que se ponen en riesgo miles de puestos de trabajo generados a partir de ellas”, señala el texto.

Otro ítem no menor es el de la seguridad. Los intendentes dicen que el Ministerio de Seguridad provincial no les gira los fondos acordados para el funcionamiento de las policías de los distintos distritos, lo que repercute directamente en la gente, en un tema tan sensible en el conurbano como es la inseguridad.

Además volvieron a plantear el absurdo de la suma fija a los empleados públicos. Kicillof al principio dudó en adherir, pero después, empujado por la ola de la campaña electoral, anunció que no solo la Provincia la iba a pagar sino que también lo harían los distintos municipios. Para eso creó un fondo de compensación que solo adelantó la mitad del dinero que necesitan los intendentes para cumplir con esa nueva obligación y lo hizo en calidad de préstamo que debe ser devuelto en diciembre. Con lo cual los jefes comunales quedaron entre la espada y la pared. “Se toman medidas de manera unilateral que afectan el normal desenvolvimiento de nuestros municipios y que al no ser acompañadas con los recursos suficientes para hacer frente a dichas obligaciones también generan inconvenientes en los gobiernos locales, en un contexto de absoluta dificultad financiera”, se quejaron.

Finalmente pidieron ser convocados a una reunión que solicitaron, sin tener respuesta, el 7 de septiembre pasado y pidieron “una sana convivencia democrática, con diálogo y consenso político”, valores que en medio de la campaña parecen haberse olvidado en la gobernación.