Cuánto vale demorar el juicio (primera parte)
Por Lic. Rodolfo Florido
Nadie lo expresa pero flota en el ambiente. La sociedad siente y sospecha que un cálculo oscuro sobrevuela cuando dicen que el juicio oral y público por la causa de los cuadernos puede demorar 5 años o más.
Las explicaciones suenan huecas, vacías, antojadizas.
4 horas una vez por semana y por zoom. Una burla cruel. Una sociedad que aún hoy paga los precios de la corrupción; en vidas tomadas, sueños secuestrados y esperanzas robadas.
¿Cómo no sospechar?
¿A quién acusar?
A Jueces que pueden ordenar, ahora sí con gran velocidad y eficiencia que toda la ineficiencia para unos se transforme en eficiencia sorpresiva y abusiva para el que ose poner un manto de dudas sobre su Majestad los Jueces. ¿Hay jueces extraordinarios? Si. También los hay de los otros y se cuentan por docenas. Condenados, procesados, echados, etc.
Este juicio es tan obvio como el de los bolsos de López.
Durante más de una década la impecable investigación de ahora fallecido Bonadío, Stornelli y del periodista Diego Cabot, logró, por lo abrumadora, que los “arrepentidos” aparecieran debajo de las piedras.
Luego y como si fuera poco, esos intentos vergonzosos y vergonzantes de comprar el resultado con pagos voluntarios. Ofrecieron departamentos, lanchas, dólares y pesos. Y todo eso a luz del día..
Todo era vergonzantemente obvio, pero lo intentaron porque sabían que los arrepentidos, los cuadernos y los videitos de Centeno, los condenaban sin lugar a duda alguna.
La Justicia se vestirá con sus mejores galas, usará sus más rebuscados términos para llegar a un mismo y obvio resultado y no por la opinión de quien esto escribe sino por la obviedad abrumadora de las pruebas y testimonios.
Toda la mejor o peor voluntad de los defensores y los jueces se convocarán en derredor de obtener más o menores penas para sus defendidos. Tratarán de evitar la figura de “asociación ilícita” y esta vez será muy difícil.
Lo brutal de la recaudación, el método y la entrega del dinero en la propia quinta de Olivos y en la casa de la sobreviviente del matrimonio Kirchner, la inefable Cristina, esta vez no tiene excusas y cualquier disminución de los cargos sonará como una campanada en el interior de una Iglesia
Si la indignación popular no hubiese hablado a través de los medios este juicio podría haber durado más años que los años promedio de sobrevida que los imputados tienen.
¿Cómo no sospechar?
Jueces normales harían cola para estar presentes todos los días en el caso más emblemático de la historia político judicial de la Argentina, desde el juicio a las Juntas, que, por cierto, no duró ni una quinta parte de lo que preveían con un juicio por zoom y cuatro horas semanales.
¿Cómo no sospechar?
De lunes a viernes y sin feriados judiciales es lo que la sociedad espera y reclama para quienes ganan un muyyyy buen salario pagado por los impuestos ciudadanos. Ahhh y poder ver el juicio por Tele sin imputados que se burlen comiendo helado desde la cama como si supiera algo que el resto de los mortales no sabe pero sospecha.
¿Cómo no sospechar?
Un antiguo cuenta decía que un acusado frente al Rey de una Monarquía absoluta es condenado a muerte y el Rey le informa su fallo y le comunica que puede tener una última y razonable ultima (valga la redundancia) voluntad.
El condenado le dice al Rey…; su Majestad deme su caballo preferido un año y yo le enseñaré a hablar. Si no lo logro me ejecuta y si lo logro me conmuta la pena. El Rey se ríe y le concede esta última voluntad.
Los amigos del condenado le dicen a este…, estás loco, no hay manera de que un caballo hable. Y él les dice en un año se puede morir el rey, me puedo morir yo, se puede morir el caballo, puede caer la Monarquía o puedo usar el caballo para escaparme.
¿Cómo no sospechar’
Sobre todo si es el peronismo kirchnerista el que necesita tiempo para que las sucesiones internas no se realicen porque es el único poder que les resta para no ser más que un mal sueño en el historia del país y del propio peronismo.
Los jueces así como sobreactuaron la demora ahora deberán seguramente sobreactuar trabajo y decisiones o por lo menos no dejar que le coman un cuarto quilo de helado en la cara.
En la segunda y última parte explicaremos porque la interna y su destino invadió a la Justicia.


Seguir con este “juicio” vergonzoso, es reirse en la cara de los argentinos. Los argentinos debemos exigir jornadas presenciales y diarias ( de lunes a sábados) y CONDENAR A ESTOS CHORROS de una buena vez. El pueblo “arde” ( se vió en el chaco con el caso Cecilia)