Conurbano violento: estados alterados en medio de la inundación
Al desastre que provocaron las intensas lluvias en el conurbano, con los vecinos ocupándose solos de desobstruir las bocas de tormenta y de establecer una red de solidaridad que los municipios no dieron, se sumaron, en algunos distritos, los estados alterados.
Fue puntualmente en zona sur donde se dieron dos episodios de violencia en medio del drama de las inundaciones. En Gerli, una vecina intentó frenar a un auto para que no avanzara haciendo olas por la calle donde había casas llenas de agua, pero fue brutalmente arrastrada por el conductor.
El hecho se dio en la esquina de El Líbano y Bustamante. Según la propia protagonista, los vecinos habían salido a organizar el tránsito para que los vehículos pasaran de a uno y no siguieran empujando el agua dentro de las casas. “Le pedí que no avanzara pero el conductor me hizo señas de no escuchar. Entonces me acerqué a la ventanilla para poder hablarle y en ese momento aceleró. Lo primero que me salió fue golpearle el capot intentando que pare y sin pensarlo me subí al frente del auto porque no sabía dónde meterme”, relató en redes. “Este loco aceleró conmigo encima”, cerró la mujer, que por suerte resultó ilesa.
El otro hecho sucedió en Lanús, con otro vehículo que intentaba avanzar en medio de una calle convertida en un río. Los vecinos inundados le gritaron que frenara, pero el conductor continuó su marcha haciendo olas que ingresaban a las viviendas. Después de que había recorrido varios metros, un hombre desesperado se acercó con un palo para increparlo y desde la camioneta el conductor sacó un arma y disparó dos veces al aire para poder seguir.
En medio del drama y de la falta de autoridades que organicen la asistencia y controlen el tránsito en las zonas más complicadas, los vecinos del conurbano están, una vez más, solos e indefensos. Entre ellos deben organizarse para limpiar la basura de las bocas de tormenta, salvar lo que les queda y resolver los conflictos que surgen en un contexto de urgencia en la que los Estados municipales y el Estado provincial brillaron por su ausencia.
