Kicillof recibió al campo pero no da marcha atrás con el inmobiliario rural
El gobernador Axel Kicillof escuchó los reclamos de la mesa de enlace y de otras agrupaciones del agro bonaerenses y se comprometió a analizarlo pero por ahora no dio señales de dar marcha atrás con el impuesto inmobiliario rural, que llegó con aumentos que alcanzan en algunos casos el 500%.
Los ruralistas se fueron de la reunión en La Plata con un sabor agridulce. Por un lado celebraron la convocatoria y la apertura al diálogo, pero por el otro solo recibieron una vaga promesa de que habrá algún tipo de propuesta que estaría lejos de retrotraer el aumento, que debería haber sido de hasta el 200% pero fue ampliamente superior.
Los referentes del campo sostienen que la situación de los productores es cada vez más acuciante, porque muchos ya no pueden hacer frente a los montos tributarios que les impone la provincia. Además, Arba recortó los beneficios por buen contribuyente o pago electrónico,lo cual potenció aún más el aumento.
Kicillof prometió acompañar al campo con una agenda abierta para apuntalar la producción y sostuvo que la provincia utiliza todos los recursos que tiene a su disposición para ayudar al sector. Sin embargo, desde su administración fueron tajantes al sostener que “respecto al impuesto inmobiliario rural, se estableció que ninguna partida estuvo por fuera de lo que establece la ley impositiva que votó la Legislatura en diciembre pasado ni hubo errores en las liquidaciones”.
Este jueves los referentes del campo llevarán su reclamo a la Legislatura con el objetivo de tener el apoyo de diputados y senadores provinciales. Muchos de ellos ven con buenos ojos hacer una presentación ante la justicia contra el impuestazo o directamente dejar de pagarlo si no tienen, en el corto plazo, una respuesta concreta del gobernador.