Kicillof hace su juego y volvió a confrontar con Milei: “En la Provincia la obra pública no se paraliza”
En medio de las negociaciones que mantiene el Gobierno nacional con los mandatarios provinciales para destrabar la nueva Ley de Bases, Axel Kicillof volvió a aprovechar el complejo escenario social que se vive en territorio bonaerense para criticar a Javier Milei por la obra pública y buscar posicionarse como una alternativa firme de oposición dentro del peronismo.
En una recorrida por las obras de saneamiento y adecuación del cauce del río Luján, el gobernador bonaerense diferenció su gestión de la que impulsa el presidente e hizo foco en las distintas prioridades de cada administración. “En la provincia de Buenos Aires la obra pública no se paraliza: continúa para mitigar inundaciones en Luján, para que no se deterioren las rutas ni se frene la urbanización de barrios populares”,dijo.
Kicillof explicó que, frente a los recortes impuestos por la Nación, las obras son financiadas por fondos extranjeros: “recuperamos el crédito internacional para estos trabajos”, sostuvo.
De a poco el nombre del gobernador bonaerense empezó a sonar fuerte en la interna del peronismo, que después de la derrota ante los libertarios parece haberse quedado sin figuras presidenciables. Un grupo de intendentes, entre los que están Juan de Jesús, Jorge Ferraresi y el gesellino Gustavo Barrera, lo impulsa como candidato para 2027. En este sentido, Kicillof aprovechó para pararse en la vereda de enfrente de la administración de Milei y acusarlo de incumplir sus deberes frente al Estado: “El Gobierno nacional se ausenta y deserta de sus responsabilidades y el único ganador de esta situación es el sector financiero. Con una pequeña parte de todos esos recursos podrían terminar las obras que pararon en las escuelas, los hospitales y las rutas”, sentenció.
Mientras la crisis hace estragos en el conurbano profundo, el gobernador aprovecha cada anuncio o aparición pública para apuntarle al Ejecutivo nacional. La estrategia es doble: posicionarse en la interna de un peronismo obligado a reformularse y mostrarse al lado de las necesidades más urgentes de los vecinos, que en la provincia que gobierna hace más de 4 años están muy lejos de estar satisfechas.
