Entró a robar delante de un patrullero: La policía no hizo nada
Un hecho insólito, que sería hasta cómico si no se tratara de una historia más de inseguridad en un contexto de crisis extrema. En Aldo Bonzi, un delincuente estuvo forzando la puerta de un kiosco durante más de 10 minutos a metros de un patrullero que estaba estacionado con dos policías adentro. Todo además quedó filmado por las cámaras de seguridad.
Después de barretear la reja, el ladrón estuvo 20 minutos en el local y se escapó con dos bolsas con cigarrillos, golosinas y herramientas, de nuevo delante del móvil policial y los agentes, que seguían inmutables. Los dueños del comercio, que publicaron los videos en las redes a modo de denuncia, creen que los oficiales debían estar durmiendo.
“Estamos más sorprendidos que indignados. El patrullero en la esquina te daba seguridad, más en este barrio que roban todo el tiempo, pero no”, dice Facundo, dueño del kiosco
“Llegué al kiosco y me di cuenta de que estaba todo tirado, que el freezer estaba corrido y que habían desaparecido todos los chocolates. La reja estaba doblada como si la hubiesen palanqueado. Fui hasta el patrullero que está a 20 metros y le golpee la ventanilla. El policía estaba con el teléfono en la mano. Les pregunté si habían estado todo el día ahí y me dijeron que sí”, relata con incredulidad Facundo. “Cuando les dije que me habían robado se bajaron del patrullero y me dijeron que no podía ser”, cuenta.
Los efectivos fueron desplazados y el propio comisario fue a pedirle perdón a Facundo. “Me dijo ‘no sé cómo pedirte disculpas, no me da la cara’ “.
En los últimos meses ya hubo 3 robos violentos en la zona. Se suponía que la presencia policial era para prevenir ese tipo de hechos y por lo menos disuadir a los ladrones, pero nada de eso sucedió. “Robaron en sus caras y a nosotros nos desvalijaron el kiosco. Perdimos casi 300 mil pesos. Una tristeza total”, cierra Facundo con impotencia.
