Embocada piraña en San Martín
Los delincuentes sienten el poder que les da la impunidad con la que se mueven en las calles de la provincia y por esa razón cometen robos cada vez más audaces. En San Martín, ya no usan motos o autos para encerrar a otros coches y robarles sino que directamente se plantan en la calle con un arma y los obligan a frenar.
Esto le pasó a un remisero, que llevaba una pasajera en la intersección de las calles Bahía Blanca e Intendente Casares.
El hombre disminuyó un poco la marcha en la esquina y eso le dio tiempo a los delincuentes a ponerse en su camino y hacer que detuviera el auto.
En cuestión de segundos, mientras uno de los asaltantes le apuntaba, los otros tres abrieron todas las puertas del coche y obligaron a bajar tanto al chofer como a la pasajera. Finalmente se llevaron el auto en dirección a Villa La Rana.
“Ya ni remises podemos tomar”, se lamentan los vecinos del barrio que denuncian que cada vez hay más robos y que la policía no sólo no aparece sino que, cuando lo hace, les aconseja que no anden por la calle. Así de insólito, así de triste.