El conurbano se sigue desangrando
Pese a la amplia victoria del peronismo en las elecciones legislativas del domingo y a los discursos triunfalistas que hablaban de contener y defender al pueblo bonaerense, la inseguridad -uno de los principales males que se sufren en el conurbano- no parece tener una solución a corto plazo.
La Matanza es uno de los distritos donde Fuerza Patria duplicó en votos a La Libertad Avanza. Allí, en Virrey del Pino, se vivieron otra vez escenas dignas de un territorio sin ley ni Estado.
Un joven iba en su moto cuando en el cruce de las calles Hidalgo y Campana fue interceptado por delincuentes que primero lo desestabilizaron para hacerlo caer y después le dispararon sin titubear para robarle el vehículo.
Todo quedó registrado por cámaras de seguridad que ya no disuaden a nadie y sólo sirven para documentar lo que todos los bonaerenses sienten en carne propia: que los delincuentes son dueños de la calle y que la policía nunca está para defenderlos.
Los ladrones se llevaron la moto y la víctima quedó herida con un disparo en el abdomen y tuvo que ser derivada a un hospital, donde tiene que dar gracias de que no lo mataron.
Son días de sonrisas en el seno del poder bonaerense. El intendente, el gobernador y la vicegobernadora festejan. Pero en la calle, donde está la gente de a pie, mandan los delincuentes.
