Cambios en la Policía Federal: Milei quiere su propio FBI
El Gobierno nacional oficializó una profunda reforma en la Policía Federal Argentina, que dejará de dedicarse a tareas de seguridad en la Ciudad de Buenos Aires y se ocupará de tareas de investigación y prevención de delitos complejos, como el narcotráfico, la trata de personas o las redes criminales.
A través del Decreto 383/2025, Javier Milei modificó el estatuto de la Policía Federal para dar comienzo a un proceso de modernización, con cambios en la estructura interna de la fuerza, reorganización del personal y modificaciones presupuestarias de acuerdo a los nuevos objetivos de la institución.
En este sentido, se buscará adquirir tecnología y desarrollar capacitaciones acordes con los tiempos que corren a la vez que se pondrá el foco en tener más articulación con el sistema judicial. El financiamiento para este desarrollo vendrá de un recorte de personal: al dejar de intervenir en tareas de seguridad no federales, se requerirán menos agentes. Habrá una reducción progresiva del ingreso de suboficiales y una promoción de los oficiales superiores de acuerdo a su formación y sus estudios.
Con relación a este punto, la idea de Javier Milei es crear una fuerza parecida al FBI de Estados Unidos, con universitarios y graduados con perfiles técnicos aptos para ocupar puestos en áreas estratégicas para la investigación.
También se destaca que habrá más verticalidad en la fuerza y que la Dirección de Asuntos Internos pasará a tener un vínculo directo con el Ministerio de Seguridad y podrá orientar investigaciones a pedido de Patricia Bullrich.
Un punto controvertido es el que atañe a la inteligencia criminal. La nueva policía podrá realizar tareas de espionaje preventivo en redes sociales, sitios web y otras fuentes digitales sin necesidad de una autorización judicial.
El otro cuestionamiento parte de las mismas fuerzas de seguridad. Tanto Gendarmería como Prefectura deslizan por lo bajo que la Federal tendrá facultades extraordinarias por encima de otras fuerzas.
Así las cosas, la nueva policía ya está en marcha vía decreto. Javier Milei sueña con tener su propio FBI. Habrá que ver el grado de profesionalización que muestra la fuerza y su alcance en la práctica.
