Mataron a otro colectivero, agredieron a Berni y el problema de la inseguridad pone en jaque a la provincia
Hartos de la inseguridad, con dolor por la muerte de un compañero y sin nada que perder. Los choferes de colectivos de la zona oeste del Gran Buenos Aires protagonizaron una pueblada en la ruta 3, cuando el Ministro de Seguridad Sergio Berni llegó a la protesta por un nuevo crimen y quiso desactivarla.
Sin temores y llenos de bronca, atacaron al ministro a trompadas, piedrazos y botellazos. Berni, el hombre fuerte de la seguridad en la provincia, terminó evacuado a la fuerza y ensangrentado. En el hospital Churruca constataron que tiene una herida severa en la nuca producto del impacto de un cascote, además de cortes en la nariz y heridas en la cabeza.
El crimen y la violenta protesta derivaron en un paro por tiempo indeterminado en la mayoría de las líneas de colectivos de zona oeste y en una situación de anomia y quiebre de confianza con las autoridades que estremece y preocupa. Los vecinos y trabajadores están hartos y ya no quieren escuchar más anuncios.
“Berni solo hace promesas y en la calle siguen matando gente”, dijeron los compañeros del colectivero asesinado. “La inseguridad es terrible. Yo termino el recorrido a las 3 de la mañana y cada vez es más inseguro. Suben a robarte, suben borrachos o drogados”, explicaba otro de los choferes. “Hace dos semanas le pegaron un tiro en un brazo a un compañero”, denunciaba un tercero.
Daniel Barrientos tenía 65 años, estaba a un mes de jubilarse y quería seguir trabajando porque hacía poco había perdido a su esposa. Sus compañeros dicen que era uno de los pocos que se animaba a hacer el turno noche por los barrios calientes de La Matanza.
“El tema de la seguridad está desbordado. A todos los barrios del conurbano les pasa esto de la inseguridad, pero en La Matanza es peor. Hay robos todos los días. Queremos que nos pongan cabinas arriba de las unidades, que haya patrulleros en los barrios”, reclamaban los choferes. “Nos prometieron muchas cosas y no las cumplieron”, insistían.
En 5 años ya hubo 3 crímenes de colectiveros en La Matanza. En 2018 mataron a Leandro Alcaraz, de la línea 620; en 2020 mataron a Pablo Flores de la línea 218 y ahora a Daniel Barrientos, también de la 620. La falta de confianza en las autoridades de la provincia se convirtió en bronca incontenible. “Berni nos viene a hablar ahora y hace 5 años nos prometió lo mismo. Y en el medio son cientos de robos y hechos de inseguridad” reclamaron. “No lo queremos escuchar más” repetían.
Elisa, hermana de Pablo Flores, colectivero de la lìnea 218 asesinado en Virrey del Pino hace 2 años, también se hizo presente en la protesta en General Paz y Alberdi, Lomas del Mirador, y expresó su dolor: “Estamos cada vez más inseguros y encima después de los crímenes no hay justicia. Estamos cansados de hacer banderas para pedir que metan presos a los asesinos”.
El paro es por tiempo indeterminado en más de 170 líneas de colectivo del AMBA. Hay un detenido y dos prófugos por el crimen del chofer. Mientras tanto el reclamo de seguridad se extiende en el conurbano e interpela fuertemente, impulsado por el hartazgo, a los funcionarios encargados del área.
